Templo del teatro italiano, el Piccolo Teatro de Milán es el primer teatro estable del país. Fue fundado por Paolo Grassi y Giorgio Strehler y en la actualidad está dirigido por Luca Ronconi. Se encuentra en una pequeña travesía de Via Dante, una zona peatonal repleta de tiendas y bares que comunica el Duomo con el castillo Sforzesco, en una situación céntrica de la ciudad. Durante la restauración del edificio se encontraron, en el claustro, frescos de Leonardo y de Bramante que el público puede visitar.